Desde 1991, desarrollo como actividad profesional, la restauración de muebles y obras de arte. Este ha sido mi modo de vida desde entonces, difícil muchas veces pero siempre impulsada con la pasión y el deseo de evolucionar constantemente.

A día de hoy, con muchos años de experiencia e infinidad de muebles y obras de arte restaurados, puedo decir que tengo los medios y la capacidad para restaurar esas piezas complejas y muy deterioradas que son la especialidad de la casa.

El estudio ha sido contínuo no sólo en lo que se refiere a los criterios y técnicas de restauración aplicados, sino en lo referente al conocimiento y dominio de las técnicas que fueron utilizadas en la pieza original.

En lo referente a los muebles, rara vez no es desmontado en este taller y vuelto a montar cuidadosamente con objeto de garantizar su estabilidad estructural. Los defectos constructivos son corregidos desde el respeto pero sin obviarlos. No es admisible perpetuar una situación que desemboque en nuevos desperfectos que pueden llegar incluso a ser irreparables.

Piezas muy deterioradas, elementos perdidos o tan dañados que son ya inservibles, son reproducidos con los mismos materiales originales.